Venezuela: del todo a la nada
“Ser rico es malo, es inhumano. Así lo digo y condeno a los ricos” expresó Hugo Chávez frente a un grupo de empresarios en abril de 2005. En aquellas fechas, tales ideales parecen más que cumplidos. Sim embargo, aquellas utópicas y para algunas consoladoras palabras no han dado, hoy en día, el resultado esperado.
Hoy en día es imposible acceder a un estilo de vida digno, así la condena cayó claramente sobre cualquier venezolano que no busco otras oportunidades fuera. Los hechos desgarradores son vistos en todas las plataformas y la mayoría de nosotros encontramos en algún amigo venezolano una fuente de información mas humana que un canal de noticias.
Hace pocos días Venezuela sufrió un apagón de más de 100 horas que ha causado efectos a lo largo y ancho del país, incluso el mayor estrago en los hospitales provocando numerosas muertes. A finales de febrero, la ayuda humanitaria que entraría por la frontera se encontró boicoteada por las Fuerzas Armadas, provocando un altercado cubierto de sangre. Por otra parte, la moneda nacional esta sufriendo los impactos de la incertidumbre en el mercado lo cual acentúa la dificultad de los venezolanos para cubrir necesidades básicas, un problema que lleva corriendo por mas de un año.
Una solución definitiva es necesaria para esta opresión que no ve final, ya que ni los fines pacíficos ni aquellos más drásticos, han conseguido llevar el pueblo venezolano a la libertad y democracia por la que luchan.
Por ahora, se han visto ciertos cambios democráticos. La válvula constitucional fue activada por Guaidó como presidente interino tal y como está permitido en la Constitución Venezolana. Sin embargo, no fue suficiente para que Maduro dejara atrás su posición - que aun ocupa- en el Palacio de Gobierno. La presidencia de Guaidó cuenta con el respaldo y reconocimiento de gran parte de la comunidad internacional. De momento, Estados Unidos no se ha proclamado para una intervención oficial, pero desde el 19 de marzo, Estados Unidos y Rusia se encuentran en Roma para discutir el tema. En el país, el pueblo está en las calles y Guaidó motiva a no perder las esperanzas para seguir adelante. En el caso de las Fuerzas Armadas, aunque un grupo inclinarían la balanza contra Maduro, la represión es enorme y los militares venezolanos se encuentran en el lado opresor de la contienda sin forma de salir.
Un conflicto de poder contra humanidad, del cual es imposible salir victorioso, pero la lucha es noble, se quiere un futuro mejor. Definitivamente, desde las palabras de Chávez en 2005 abogando por el desprecio a los ricos hasta las palabras de esperanza de Guaidó en 2019, ríos de tinta, de sangre y de esperanzas han corrido. Aunque puede que ya no hayan ricos, tampoco hay condiciones para vivir.